sábado, 6 de marzo de 2010

Retrato del último fín de semana

"It pained him that he did not know well what politics meant and that he did not know where the universe ended. He felt small and weak. When would he be like the fellows in poetry and rhetoric?"

(Le dolía darse cuenta de que en realidad no tenía ni idea de política y de que mucho menos sabía dónde acababa el universo. Se sintió pequeño y débil. ¿Cuándo iba por fin a ser él como esos tipos de los libros de poesía y retórica?)




El viernes pasado por la noche discutimos sobre la existencia o no de las clases y los prejuicios sociales a golpe de Gin Tonics en Le Cabrera. Paul Weller aseguró a mitad de los 80 que esta era una cuestión absolutamente vigente. Es verdad que ya han pasado veinticinco años desde que él escribiera Walls come tumbling down, pero supongo que el mundo no ha cambiado tanto desde entonces. ¿O si? Negar la evidencia no la hace desaparecer, aunque tengo la impresión de que llamar a las cosas por su nombre no es políticamente correcto. Sin embargo yo soy obstinada y le sigo rezando a Juan Ramón cada día: “ Intelijencia, dame el nombre exacto de las cosas”.

Siguiendo con el hilo de la conversación el sábado por la noche asisto a un debate en plena cena sobre quién ha dejado más negativos estragos en el mundo, si el comunismo o el capitalismo. Estamos bebiendo Marqués de Murrieta, comiendo carpaccio de atún sobre una base de crema de aguacate y una cosa muy rica que se llama patatas buthan. ¿De verdad es ético tener esta clase de conversación en un escenario así? ¿Estar totalmente seducidos por este bienestar no nos desautoriza a decir que no nos gusta? ¿ Qué valor ocupa en nosotros la denuncia si no es más que un pin trendy que prenderse en la solapa? ¿No es un poco hipocritilla atacar el consumismo y salir después corriendo a rescatar esa chaqueta de Paul&Joe que han puesto a precio de outlet en nuestra tienda favorita?

Al final la noche acaba como suele acabar en estos casos, cuando se habla, se siente y se bebe en exceso, con "mal de amores". Tras nuestra cena temprana y un periplo por varios bares acabamos en De Diego y allí, por azar, se une al grupo y a la conversación un caballero castellano, curiosamente también conocido comentarista político. Pero él no quiere hablar de política, él está bebiendo un "mal de amores" y prefiere hablar de viajes, de Conrad y de liviandad. Yo también quiero hablar de Conrad, de libros y de música, que es lo único que me importa, “los placeres que conocí en Portora” que díría Oscar Wilde desde su exilio. Pero el caballero castellano no quiere escucharme, solo quiere beber y no estar solo, así que me vuelvo hacia la barra y le pido al maestro de ceremonias que me haga a mi también uno de esos cocktails que ha bautizado de manera tan curiosa. Y muy señorialmente, con oficio y dedicación, el maestro Diego improvisa tras la barra para mi un brebaje que dentro de una estilizada copa de cristal transparente se convierte en una pequeña obra de arte. Me lo ofrece con una sonrisa y me dice. "Un mal de amores para alguien que es imposible que tenga de eso". “Tiene razón, Don Diego” le digo “yo no tengo de eso, pero pregunte usted a mi antiguo corazón, a ver qué le cuenta”. El mal de amores del Caballero Castellano tiene cáscara de lima, el mío de naranja. Y eso es perfectamente natural porque todo el mundo sabe que no hay dos males de amores iguales. No hay más que ver a nuestro grupo. Todos hemos bebido demasiado y los desencuentros empiezan a hacer acto de presencia.

“No hay tantas mujeres interesantes. O al menos no tantas mujeres interesantes que se interesen por mi”. “¿No crees que deberíamos casarnos?” “Lo que creo es que eres una niña mala” “¿Crees que eres mala, pequeña? Eres mala”. “El debería estar aquí ahora y no tú”.“Tengo que decir que te estás confundiendo totalmente”. “Oye, ¿y tú por qué coqueteas con todo el mundo?” “Nunca había querido así...”. “A lo mejor es que no encajamos del todo”. “Me haces más falta tú a mi que yo a ti”. “Puede que no te hayas dado cuenta pero no soy cualquier chica, ni siquiera soy una chica, soy un caballero. Y yo sí respeto algunas normas. Quizá por eso nunca consigo nada”.

“What was after the universe? Nothing. But was there anything round the universe to show where it stopped before the nothing place began? It could not be a wall; but there could be a thin thin line there all round everything. It was very big to think about everything and everywhere. Only God could do that. God was God's name just as his name was Stephen. DIEU was the French for God and that was God's name too; and when anyone prayed to God and said DIEU then God knew at once that it was a French person that was praying. But, though there were different names for God in all the different languages in the world and God understood what all the people who prayed said in their different languages, still God remained always the same God and God's real name was God.

It made him very tired to think that way. It made him feel his head very big. He turned over the flyleaf and looked wearily at the green round earth in the middle of the maroon clouds. He wondered which was right..."

(¿Qué había más allá del universo? La Nada. ¿Pero había algo alrededor del universo que mostraba dónde acababa éste y empezaba la Nada? No podía ser un muro; pero sí podía tratarse de una línea muy muy fina que rodeara todo. Pensar sobre el Todo era una cosa muy seria. Solo Dios podía hacer algo así. Dios era el nombre de Dios, de la misma manera que Stephen era su nombre. DIEU era el nombre de Dios en francés; y cuando alguien rezaba a Dios y decía DIEU entonces Dios sabía enseguida que era un francés el que estaba rezando. Pero, aunque a Dios se le llamara de diferentes maneras en las diferentes lenguas del mundo y Dios pudiera entender lo que todas esas personas estaban rezando en idiomas distintos, Dios seguía siendo el mismo y único Dios, y además el verdadero nombre de Dios era Dios.

Se quedaba agotado cuando se ponía a pensar en cosas así. Sentía como si la cabeza le pesara muchísimo. Así que le dio la vuelta al libro y se quedó mirando vagamente la tierra verde y redonda en medio de las nubes color granate. Y se preguntó qué era lo correcto…”)

Referencias interesantes:


1.-A portrait of an artist as a young man. James Joyce. De donde son los dos textos citados en la entrada. No suelo traducir los textos que copio o escribo en inglés, pero en este caso lo he hecho. La traducción que Dámaso Alonso hizo de El retrato del artista adolescente es una obra de arte en sí, pero no tenía mi edición traducida a mano. Y de hecho lo he preferido, porque me ha servido para hacer mi traducción-interpretación personal.

2.- A portrait of an artist as a young dog. Dylan Thomas. Otra forma de dibujar un retrato.


3.- Our Favourite Shop. Style Council. A este álbum pertenece la canción citada Walls comes tumbling down. Es una maravilla ( incluyendo el diseño de la carpeta) y uno de mis discos favoritos.


4.- De Diego. Qué puedo yo decir de De Diego que no se haya dicho ya.


5.- Le Cabrera. Bar cocktelería. Es el nuevo local de Sergi Arola y Diego Cabrera.Nada reseñable excepto que ha sido muy reseñado.

6.- El último testamento de Oscar Wilde, Peter Ackroyd. Es un libro de ficción en el que este autor y biógrafo de grandes figuras de la literatura inglesa, recrea sobre la base de hechos y personajes reales los últimos días del celebre dramaturgo irlandés en su exilio parisino. A mi me pareció una lectura muy entretenida . Obvia decir que no hay mayor entretenimiento que leer al propio Oscar Wilde. Su ingenio resulta siempre fresco, sorprendente y brillante.

7.- Eternidades, Juan Ramón Jiménez. El verso citado pertenece a un poema de este libro, que junto con Diario de un poeta recién casado, Belleza, y Piedra y Cielo fueron lectura de referencia para mi en mi "propio Portora", es decir, en mi época escolar. 

23 comentarios:

  1. Anónimo7.3.10

    Lo que más me sorprende de tu blog es que no reciba más comentarios, probablemente sea porque lo que escribes es tan bueno y de tanta altura que es difícil igualarlo.

    Cómo me gustan esas noches de tertulia interminable, facilitada por un poco de alcohol, hablando de libros, vivencias, pasado y futuro. En el presente.

    Como siempre, me enloquecen tus referencias: Nunca he podido leer "Ulysses", me supera. Lo sigo intentando pero de momento me quedo con el artista adolescente, que mi cabeza es capaz de comprender, más o menos. The Style Council... the long hot summer. Me vuelve loco. Paul Weller debería haberse retirado hace tiempo, pero menudo músico. Mejor Wilde que Ackroyd, por supuesto. "It's either that wallpaper or me".

    Feliz domingo.

    La próxima vez que vaya a Madrid te invito a un carpaccio de atún y luego a un gimlet en De Diego. No, mejor en Cock.

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  2. Anónimo7.3.10

    Y sigue el poema de J.R.Jimenez que citas: " ...Que mi palabra sea
    la cosa misma,
    creada por mi alma nuevamente.
    Que por mí vayan todos
    los que no las conocen, a las cosas;
    que por mí vayan todos
    los que ya las olvidan, a las cosas;
    que por mí vayan todos
    los mismos que las aman, a las cosas..."
    Y yo, que pienso que lo que no se nombra no existe, agradezco que Lullu escriba, y de nombre a las cosas. Y que me haga volver, si ya la olvidaba, a aquella noche. Y sin la coartada del alcohol revivo la noche -creada por Lullu nuevamente- y aprecio con mayor intensidad si cabe, sus luces y sus sombras, sus aristas y sus trampas. Y la lectura de este relato cocktail, mezcla perfecta, me provoca una resaca más larga y profunda que la de aquella noche...

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  3. Anónimo8.3.10

    ¿tu Portora es tu época escolar?
    Me ha gustado mucho la entrada, muy evocadora de otros tiempos para mí pasados, en los que salía noche sí noche también. Eran noches donde el universo entero se concentraba en el microcosmos de un bar. Estoy con Squirrel, mejor el Cock.
    Juan Ramón Jiménez, muy talentoso, poesías muy bonitas. Viento largo, luna grande, noche de todos los santos (siempre pienso en esa poesía el uno de noviembre). Pero me cae de pena. Debería estar prohibido divulgar ningún detalle biográfico de ningún escritor, sobre todo de los buenos.
    Oscar Wilde... un must.
    Ulises yo tuve la suerte de estudiarlo en el colegio con un profesor estupendo que nos daba un seminario sobre "Técnicas literarias del siglo veinte" (joé qué viejuno suena eso, no somos nadie); de ahí nace mi amor por El cuarteto de Alejandría (que da mucho juego en una noche de ésas como la que has contado...) que muchos dicen que si es presuntuosa o qué se yo, pero para mí es lo más de lo más.
    Besos
    Notorious

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  4. Hola! Yo también te he conocido gracias a Thefirstsquirrel!
    Qué pasada de entrada: me siento un poco acomplejada... yo escribiendo chorradas en mi blog y luego veo el tuyo, tan intelectual...
    Mis noches de tertulia eran divertidas hace unos años, cuando nos juntábamos y hablábamos de la gente que conocimos hace una eternidad y de las tonterías que hacíamos en nuestra juventud. Ahora, algunas de mis amigas son madres y la tertulia, invariablemente, acaba derivándose a temas infantiles lo que es un auténtico peñazo (lo siento, ya sé que no es muy políticamente correcto decirlo...)
    Estoy totalmente de acuerdo contigo: nada más refrescante que leer a Wilde. Es toda una experiencia.
    Muak.

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  5. Squirrel, hecho! No podría resistirme a una oferta tan tentadora.Me muero por ese Gimlet! Me encanta que te guste Style Council! La verdad es que le he perdido la pista a Paul Weller hace tiempo. No escucho cosas de él de los últimos años. Anoche leí tu comentario y me quedé tan tocada con lo que dices que no supe que contestar. Que tú consideres así lo que escribo... en fin, que muchas gracias.

    Notorious, la verdad es que mi Portora no es mi época escolar para nada. Es Wilde el que evoca los placeres que conoció en su colegio que se llamaba Portora ( que repelente que soy) como los placeres que más merecen la pena y que le acompañaron a lo largo de su vida. No estoy "enganchada" a ninguna época de mi vida y no me gustaría estarlo, aunque he de confesar que la última época universitaria y los años posteriores fueron de traca.Difíciles de olvidar. De hecho estoy escribiendo algo sobre eso.

    Wilde es tremendo.Me encanta.Me gusta eso que dices del Microcosmos de un bar...yo además durante un tiempo trabajé en uno, al llegar aqui a Madrid. El cuarteto de Alejandría es otra de mis referencias muy presentes. De hecho creo que debería releerlo. Me gustan mucho los hermanos Durrel. De jovencita, me tiraba mucho más Lawrence, pero últimamente pienso mucho en Mi familia y otros animales, y Bichos y demás parientes. Y si, debería estar prohibido divulgar datos biográficos sobre los escritores, músicos...que admiras, porque luego descubres que alguien que te ha emocionado es un auténtico capullo y no debería ser así, pero entras en conflicto ;-).
    Y aunque suene pedante, tengo querencia con el Sr. Joyce. Leí mucho de él y sobre él en esa época en la que se lee compulsivamente, (antes de los veinte?) ( y eso si que se ha convertido en una especie de Portora). Stephen Dédalus es alguien importante. El retrato me parece una maravilla, los Dublineses otra y me encanta una obra de teatro suya, Exiles. Y reconozco que he echado mis ratos con Finnegans Wake ( ya sabeis que soy un poco friki). Pero hace ya tiempo. Ahora me he curado y disfruto como una loca con las novelas de aventuras.

    Anónimo, muchas gracias por tu comentario. Sabes cómo aprecio tu opinión.Y cómo me gusta lo que escribes.

    Café Olé! Gracias por pasarte!! Yo me lo pasé genial con tu blog anoche! Y de intelectual nada. Solo me responsabilizo de ese calificativo si es en el sentido que lo utiliza Cuerda en Amanece que no es poco.¿ La has visto? Me encanta esa escena en la que los labradores van charlando por el campo y uno le dice al otro " Yo también quiero ser intelectual como tú. Por que no le veo nada más que ventajas. Fíijate en ti, ni un mal resfriado el invierno pasado, y luego está eso de poder utilizar palabras como glande, o paradigmático..."Es genial. Esa película es un must. Qué me decís, Notorious, Squirrel, ...

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  6. Anónimo8.3.10

    "Amanece" es la pelicula mas espanhola que existe. Algo tan surrealista solo puede ocurrirsele a un espanhol. Mi chico (a quien me llevare a nuestro futuro encuentro, porque lo vuestro va a ser flechazo literario inmediato) siempre dice que no hay lugar mas surrealista que nuestro querido pais, y no le falta razon. Lo que me pasa con "Amanece" es que la tengo muy olvidada, tengo que volverla a ver. No me acordaba de lo de "paradigmatico" y "glande". Y deberia, porque glande (ejem) es una de mis palabras favoritas del idioma, suena de maravilla.

    Yo fui muy fan, pero muchisimo, del Cuarteto de Alejandria. Lo tengo en mi lista de libros favoritos en el perfil de Blogger. Con el tiempo me he ido haciendo mas de Gerald, es curioso. Lo mas exquisito (y caro) que he comprado en mi vida fue una primera edicion del Cuarteto (al completo) firmada por Lawrence Durrell y dedicada a nosequien. Se la regale a mi hermano por su 40 cumpleanhos... anda que no soy generoso.

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  7. Anónimo8.3.10

    Lullu, has respondido copeada? ¿Quién es ese anónimo que no soy yo?
    Amanece que no es poco la vi en el estreno, a mí me gustó mucho y a la gente con la que iba no. También tendría que volverla a ver, en la lista está.
    Yo soy patológicamente nostálgica. Vivo añorando épocas pasadas, aun sabiendo que en diez años añoraré ésta. Tengo mil Portoras. La época escolar es una, los años de facultad otra.
    Tenemos que hacer un foro del Cuarteto. ¿Libro favorito? Balthazar. ¿Personaje? Pursewarden. ¿Es Justine lo peor? Y así.
    Notorious

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  8. Anónimo8.3.10

    La que parece copeada soy yo. Creía que el comentario del anónimo era de Squirrel. Es lo que tiene enredar cuando debería estar siguiendo esta reunión interesantísima en la que me hallo, blablablabla... cómo habla la gente, oye, pero sin cocktail en la mano, así a palo seco. En fin, voy a concentrarme, que para eso me pagan. Besos

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  9. Anónimo9.3.10

    Libro favorito: Mountolive (no estoys eguro, la verdad, lo he escrito a bote pronto, si mal no recuerdo es el mas distinto, el que esta escrito en tercera persona, verdad? han pasado mas de 20 anhos...). Personaje favorito: Clea. Justine es lo peor a los ojos de los demas, pero yo creo que en realidad no lo es, solo un bicho raro en un mundo que no es el suyo. Pero con tanto misterio (o a lo mejor ella pertenece a ese mundo y los demas son raros), en ojo ajeno parece lo peor. El cuarteto tiene tantas lecturas...

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  10. No recuerdo que Justine me cayera mal, Darley me llama la atención por ser el que cuenta la historia. Si hay un personaje implicado que hace de narrador siempre me apetece colocarme en ese lugar, aunque Pursewarden tiene lo suyo. Y estoy con Squirrel, Clea es encantadora. La verdad es que veo el Cuarteto como un solo libro. Os voy a contar un secreto. Cuando estaba en la facultad escribí una "novelita" ( suena muy pretencioso usar esta palabra?)y justamente lo que yo intentaba era escribir la misma historia desde tres puntos de vista distintos, aunque al final no fué eso exactamente. ( Notorious, de ahí lo del Cuarteto como una de mis referencias, porque la idea de Durrell me había fascinado). La cosa fué que lo mandé a unas cuantas editoriales y en todas me devolvieron el manuscrito. Pero hubo una, a la que precisamente me había dirigido porque había publicado algunos libros que me gustaban mucho, en la que el editor se molestó en escribirme una carta a mano. Me decía una frase que no se me olvida " su prosa corre, es lírica, en el mejor sentido de la palabra". Y luego decía que el texto era un poco flojo en algunas cuestiones y que el lo achacaba a que intuía que quien lo había escrito era alguien muy joven. Y añadía tiene usted que seguir, experimentar, vivir con amor y con dolor, y con el tiempo llegará a escribir historias "increibles" decía él. Qué majo, no? Después de eso se me quitó de la cabeza la idea. Pero mira, últimamente no hago más que escribir.

    Y por qué os he soltado ese rollazo?? Pero qué poco pudorosa que me estoy volviendo.Pasamos al Quinteto de Avignon? ( No lo he leído. Así que no puedo opinar)

    Notorious, me fascina que escribas durante tu reunión, eres lo más!! Es verdad que hay muchas veces que a veces añoraramos incluso lo que estamos viviendo en el presente porque somos muy conscientes de lo efímero que es. A lo mejor por eso me gusta escribir. Vente al Cock!qué con un cocktail en la mano todo ésto se ve siempre más claro!!;-)

    Squirrel, estoy un poco desconectada de la blogosfera porque estoy por ahi buscándome la vida, pero te agradezco infinito tus visitas por aqui. Por cierto, que me diste ganas de volver a ver Historias de Filadelfia, lo hice y qué peliculón!!! Por más que lo vea no decae. Dentro de un ratito te veo en el debate de "Etiqueta", que no quiero ni saber por qué número de comntarios irá ya! Un beso!

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  11. Dios mio, acabo de releer el comentario y me he dado cuenta de que hay un montón de errores, y juro que no he probado ni un solo cocktail en todo lo que va de semana. Aunque solo sea Martes. Creo que seré capaz de aguantar hasta el jueves.

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  12. Anónimo9.3.10

    Pues mira, Lullu, yo que tu me prepararia el gin tonic ahora mismo. Seguro que no te hace falta perder peso, pero esta noticia yo creo que alegra a todo el mundo. Hasta a mi, que no soy mujer: http://well.blogs.nytimes.com/2010/03/08/women-drinkers-gain-less-weight/?em

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  13. A parte de pasármelo fenomenal y de disfrutar leyéndote, tus referencias son superinteresantes y aprendo mucho. Gracias.

    Un abrazo

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  14. Anónimo10.3.10

    Mountolive "es cuando" (bromita pedorra entre Squirrel y yo) se descubre todo el pastel y se ve que nadie es lo que decía ser, por eso su lectura es más impactante, pero para prosa lírica, que corra, en el mejor sentido de la palabra, para mí Balthazar.
    Qué simpático tu no-editor, me lo imagino total, un señor buenísimo, comprometido con su trabajo y con sensibilidad e imaginación suficientes como para saber que contestar es importante, sobre todo si el destinatario es una joven que da sus primeros pasos. Qué bonito. Eso sí, la palabra "novelita" es lo peor.
    En mi trabajo acudo a tropecientas reuniones, a cuál más absurda, y donde la verborrea es inversamente proporcional a la utilidad e interés de los discursos, con lo cual... chateo.
    El quinteto de Avignon creo que la mayoría de la gente optó por no leerlo, porque sonaba a oportunista.
    Besos

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  15. thefirstsquirrel dijo...

    Lo que más me sorprende de tu blog es que no reciba más comentarios...

    aserto dice: ¿estás seguro?;)

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  16. Aserto, good morning and welcome. Creo que es la vez que más comentarios tengo. Espero que la cosa no decaiga, sobretodo hoy que estoy en uno de esos días...y no me refiero a esos dias de los que hablan ciertos anuncios de "productos" femeninos. Si no en uno de esos días que Holly Golithly llamaba "dias rojos".

    Pero yo a lo mio...Al abordaje!

    Notorious,eres una chica sofisticada, I can see that. Y eso "es cuando" "you don´t pretend to be cool, but you are just like really cool". Lo digo por tus comentarios y por un pichi de Hoss muy bonito que Squirrel ha dejado caer por algún sitio que tenías, y yo puedo imaginármelo. Si, novelita es una palabra terrible.

    Squirrel, ese artículo del New York Times que me mandaste no tiene precio. Al final no me hice el Gin Tonic ( Más que nada porque no tenía los ingredientes y ya no me apetecía salir a la calle. Estaba en pleno pirateo de la peli por la que le han dado el Oscar a Jeff Bridges. I love the Dude!!!). Pero después de leerlo y de mirar esas preciosísimas copas de la foto, ten por seguro que voy a poner en práctica la propuesta lo antes posible.

    Besos.

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  17. Anónimo11.3.10

    Tengo que confesar algo.
    Nunca he tenido un pichi.
    Ni de Hoss ni de ningún otro lado.
    No lo dije en su día porque pensé que daba una imagen de sofisticación a la par que arrojo; además, el falso recuerdo de Squirrel me intrigaba, pues se me ocurren pocas cosas con menos posibilidades de estar en mi armario que un pichi (¿me convierte eso en la antítesis de la sofisticación?)
    Pero no puedo edificar mi imagen pública sobre una mentira.
    Espero que mi familia sepa perdonarme.
    Ahora sólo quiero olvidar lo sucedido y mirar hacia adelante.
    besos

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  18. Anónimo11.3.10

    Claro que tenías un pichi, marrón, que te lo digo yo que me acuerdo total... A ver si voy a acabar quedando mal yo ;-)

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  19. Notorious, definitivamente eres sofisticada. Tu imagen pública no hace sino mejorar.

    Squirrel, aunque los cocktails no engorden, si que dejan algunas lagunas de memoria. ¿Quién de los dos has been drinking too much?

    Por cierto, ayer me pusieron en Manuela Malasaña unos gin tonics con "pepino holandés" buenísimos.Y luego me vine solita a casa y me puse El Gatopardo.Y esta mañana me he levantado de buen humor y estoy supercontenta por Kathryn Bigelow que tiene una película con Sean Penn que aqui llamaron El peso del agua que me gusta mucho.

    Un beso a los dos. ( O mejor uno a cada uno, por lo pronto)

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  20. Anónimo14.3.10

    Te sigo y me voy culturizando mientras leo (tu blog) y trasteo un poco en internet.

    Muy santas ...(una expresión que mi hermano usa frecuentemente) muy santas las traducciones de joyce. Me siento identificado...:)

    Sacaré un hueco más ancho para escribir un comentario en condiciones porque ahora toca seguir con lo mio. À tout à l'heure

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  21. Anónimo, gracias por pasarte. Si, yo también me siento identificada con esas santas palabras de Joyce, que he traducido casi queriéndome hacer un traje con ellas.( Menuda chorrada se me acaba de acudir. Pero mira, no voy a borrarla. Para que veas que soy casi más chorras que "culta";-)

    Sigue con lo tuyo y espero volver a verte por aqui. A bientot.

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  22. Jose, muchas gracias por pasarte, y muchas gracias por tu comentario.

    He intentado comentar en tu última entrada pero no he encontrado cómo hacerlo. Estoy totalmente de acuerdo contigo en que Karra Elejalde y Ana Alvarez están como nunca en La madre muerta ( Bueno, Karra Elejalde está bien en todo lo que hace). Y recuerdo el impacto que me causó Alas de mariposa. En cuanto a Victor Erice, pienso bastante en su Sur, y eso que yo siempre hablo de ir al Norte.

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